Menú

Motódromo San Pedro: una pista pionera en la década de los 50

Motódromo San Pedro: una pista pionera en la década de los 50
En 1958 el motociclismo deportivo tenía mucha actividad en el norte del país. No había autódromos ni se había inventado el motocross (este es un comentario dirigido a las nuevas generaciones). La mayoría de la actividad se efectuaba en óvalos de terracería y muchos de los pilotos visitaban el sur de Texas en busca de mejorar su manejo.
En ese mismo año, Hernán González, visionario y corredor de motocicletas, obtuvo de la galletera Santos la autorización para construir una pista diferente en los linderos de la ciudad de Monterrey, Nuevo León, y así fue como nació el motódromo de San Pedro, que durante más de una década fue pilar del deporte en esa entidad. Se convirtió en un sitio para crear nuevos valores y para brindar un buen espectáculo a los aficionados a las fuertes emociones que proporcionan las carreras de motocicletas.
La pista de terracería tenía un trazo serpenteante que la hacía única en comparación con los óvalos, tan famosos y tan usados en esa época. El mantenimiento era excelente, ya que todos los socios del motoclub que se fundó ponían su granito de arena para que la pista fuera lo que ellos querían: una de las mejores pistas de la República.
La generación que dominó las competencias en aquella época estuvo integrado por Alberto Pierantossi, Roberto Villarreal, Fernando Ortiz, los hermanos Jorge y Hernán González, Pedro González Govea, Felipe Terriquez, Horacio Salinas (quien también fue torero y artista), Javier Martínez, Sergio Luis González, José Martín y Jorge de la Garza.
Las competencias en las categorías rápidas eran dominadas por las motos inglesas, destacando las marcas BSA, Triumph, Norton, Royal Enfield; las cilindradas más populares eran las de 500 cc, y la estelar era la de 650 cc.
En diferentes épocas de la temporada se realizaban eventos nacionales, a los cuales estaban invitados tanto los pilotos mexicanos más destacados, —como Ildefonso Camarena de Guadalajara, los capitalinos Carlos Treviño, Faustino Rodríguez, Antonio López, Miguel Escalera y muchos otros— como otros deportistas del sur de Texas —como el afamado Howard Winchester—. En ocasiones llegaba un número notorio de pilotos juveniles que venían a México a probar suerte.
Las honorables hazañas históricas se diluyen con el tiempo, pero vale la pena recordar el trabajo del Motoclub y las emociones que brindaron los participantes.

Los acontecimientos más relevantes del motociclismo mundial.

Suscríbete al Newsletter

Galerias