Karina Dávila engalanó las parrillas de las carreras de motocicletas del año 2000 al 2009 montando una poderosa máquina de 600 cc y enfrentado a los varones con gallardía en los autódromos que estuvieron vigentes en esas temporadas.
Karina inició su actividad deportiva con gran intensidad en el autódromo Hermanos Gallo, de Guadalajara, su lugar de origen, y también en la pista del otro autódromo, el Toluquilla. Lo mejor fue cuando conoció el Autódromo Hermanos Rodríguez, que junto con el de Aguascalientes son los que más le agradan por las altas velocidades.
El Kart de Morelia le dejó grabado un recuerdo imborrable por la calidez con el trato del público cada vez que compitió en tierras michoacanas. Asimismo, tiene gratos recuerdos de las pistas de León y Tejería, en Veracruz, en donde varias veces corrió como parte del equipo Katana.
Tanto su primera competencia como la última tuvieron lugar en las pistas de Guadalajara, Jalisco.
A la fecha sigue conduciendo una motocicleta para sus traslados, una poderosa doble propósito de 650 cc.