En los últimos años, los diversos fabricantes de motocicletas han estado realizando pruebas y estudios que logren hacer de la motocicleta un vehículo mucho más seguro. El primer paso fue quizá la incorporación de frenos ABS, para posteriormente, incluir sistemas de tracción y estabilidad, sin dejar de lado los novedosos cascos y equipos de seguridad. Otra de las inciativas para preservar la integridad de los usuarios de las motocicletas son los sensores y cámaras de alertamiento, que tienen la funcion de indicar al piloto la aproximación de algún otro vehículo o peaton, evitando de este manera un incidente. Honda y Kawasaki se encuentran trabajando de manera ardua en esta materia nuevos sensores o radares, como otra posibilidad. Kawasaki, que como decíamos ya ha anunciado que pronto llegarán algunas de sus motos dotadas de sensores, tiene patentes cuyos dibujos representan motos como la H2 SX, Versys 1000, Ninja 400 e incluso una que parece una posible ZX-12. En este caso se habla de “sensores” que se sitúan en zonas adyacentes a los intermitentes o luces frontales y en algún caso cámaras también. Por parte de Honda parece que usará sus propios sensores pero en las patentes también se mencionan cámaras. Unas cosas con otras, el objetivo es  (literalmente) “proveer al vehículo suficiente información de los objetos que le rodean mediante dispositivos de adquisición de datos“. En los dibujos se ven diferentes ubicaciones para esos sensores y cámaras: desde, como en Kawasaki, puntos en el carenado cercanos a las luces, hasta los extremos del manillar en una moto naked. Y también en la parte trasera. Estas cámaras de vídeo, más que la función de “grabar” como las cada vez más populares cámaras para registrar accidentes y poder probar de quién fue la culpa o qué ocurrió, estarán destinadas a dar información a una centralita que detectará “presencias” y avisará al piloto en primera instancia. Permitirán controles de crucero adaptativos, avisos en caso de giro, incluso cuando se dé un paso más en conectividad, avisar a otros vehículos de nuestra presencia e intenciones.