Elvis Presley fue un icono de la música, indudablemente… Pero hay un aspecto curioso de él, relacionado con las motocicletas, que pocos conocen y que es interesante saberlo. Te lo platicamos. Resulta que contaba con una selecta pandilla de amigos con los que se dedicaba a hacer carreras ilegales cerca de su casa en Memphis. Gracias a sus conocidos conseguía que la policía cortara el tráfico en un tramo de autopista, y en ella llevaban a cabo carreras clandestinas. Tiempo después se les conoció como los “Memphis Mafia”. Se dice que Elvis no era de los más rápidos, pero solía correr a unas 110 mph (117km/h aprox.) Sin embargo Elvis no se conformaba solo con correr y tenía un gran corazón. Una muestra de ello fue cuando uno de sus amigos se compró una Triumph Bonneville 650 y Elvis quiso probarla de inmediato. Tanto le gustó, que cuando se bajó de la moto llamó al concesionario más cercano y compró nueve de esas motos para compartirlas con sus amigos.

Los que vivían cerca de la carretera tenían que padecer las salidas del grupo motociclista a altas horas de la madrugada, por lo que acabaron quejándose con el propio Elvis. Lo que el cantante hizo para solucionar esa situación fue comprar un camión para poder trasladar las motos sin molestar al vecindario. Realizó muchos actos parecidos con tal de que él y sus amigos tuvieran la oportunidad de disfrutar sus ratos libres montados en sus motocicletas. Lo único que podía detenerlo era la temporada de invierno, en la cual Elvis guardaba su moto porque consideraba que no era un vehículo apto para conducir durante esta temporada del año. De esa manera sus vecinos solo padecían sus carreras en verano. Verdaderamente curiosos estos datos del rey de rock and roll.