Hydrocycle presenta una solución innovadora al utilizar un motor eléctrico alimentado por hidrógeno, ofreciendo ventajas significativas. Mientras varios fabricantes exploran motores de combustión interna con hidrógeno como alternativa a la gasolina, la propulsión de motores eléctricos mediante una pila de hidrógeno emerge como una opción más ecológica. Varios fabricantes de motos están trabajando en motores de combustión interna alimentados por hidrógeno, como alternativa limpia a la gasolina. Pero este gas también puede usarse para impulsar motores eléctricos, en lo que se conoce como pila de hidrógeno.
Un consorcio germano-checo, compuesto por institutos, empresas y organismos, colabora en el desarrollo de una moto que utiliza hidrógeno como fuente de energía para el motor eléctrico, superando los desafíos medioambientales asociados con la fabricación y reciclaje de baterías. Este proyecto integra el diseño checo con la experiencia alemana en propulsión eléctrica e investigación de pilas de combustible.
El Instituto Fraunhofer IWU destaca como impulsor clave, abordando el desafío de condensar el convertidor de gas licuado en energía eléctrica, el depósito de hidrógeno y el motor, manteniendo el tamaño y peso de la moto. La Unión Europea respalda firmemente la apuesta por el hidrógeno, proyectando su importancia para 2030, y se espera que Hydrocycle esté operativa el próximo año, marcando un hito en la movilidad sostenible.