Este increíble modelo debutó en la edición 2025 de Milano Design Week como una obra que desafiaba los límites entre la ingeniería y la expresión artística. El reconocido diseñador Mattia Biagi fue el encargado de dar vida a esta instalación única, inspirada en la legendaria “Flying Flea”, la motocicleta lanzada en paracaídas durante la Segunda Guerra Mundial.

El corazón del proyecto es la Flying Flea FF.C6, una versión completamente eléctrica con más de 40 patentes, convertida en una escultura imponente. Cada componente fue cuidadosamente seleccionado para contar una historia a través de materiales inusuales: el tanque de energía, tallado en piedra Tívoli, remite a la forma de un paracaídas; los faros de vidrio soplado reflejan la delicadeza artesanal, mientras que las manetas en bronce fundido aportan un aire atemporal.

Otros detalles refuerzan la identidad única de la obra. Los guardabarros de resina incluyen hojas incrustadas y el asiento, de nogal macizo, ha sido moldeado manualmente. Motototem no solo celebra la tradición y la innovación, sino que también establece un diálogo entre la memoria bélica y el diseño contemporáneo.