El verano invita a rodar y descubrir nuevos paisajes, pero las altas temperaturas también suponen un desafío para tu motocicleta. Si bien, esta época es ideal para disfrutar de la carretera, es esencial que no solo te protejas tú del calor, sino que también tomes medidas para cuidar tu moto y evitar consecuencias costosas.

Dejar la moto bajo el sol directo puede afectar gravemente el estado del motor, especialmente si no se mantiene en condiciones óptimas. Para prevenir recalentamientos, revisa con frecuencia el sistema de refrigeración, asegúrate de cambiar el aceite según lo indicado y evita sobrecargarla con peso innecesario. Todo suma a la hora de mantener un funcionamiento eficiente durante los viajes más exigentes.

Las zonas costeras representan una amenaza silenciosa para las partes metálicas de tu moto. El salitre y la arena, arrastrados por el viento marino, se acumulan incluso en zonas ocultas, generando oxidación y desgaste. Una limpieza habitual con agua dulce, jabón neutro y esponja evitará daños, especialmente si también eliminas restos de insectos o excrementos de aves. Contar con productos específicos para una higiene profunda será tu mejor aliado.

Aunque la intención sea proteger, el uso excesivo de productos abrasivos puede deteriorar la pintura, corroer materiales y dañar partes delicadas como el cuero del asiento o tu propia ropa. Lo ideal es optar por soluciones suaves y finalizar con un encerado que proteja la superficie sin comprometer otros componentes.

Cubrir la moto cuando no la estás usando es una medida sencilla pero muy eficaz. Las fundas de tela transpirable son preferibles a las de plástico, que pueden atrapar humedad y favorecer la corrosión. Esta barrera física actúa como protector solar y alarga la vida útil de la moto, manteniéndola en mejores condiciones tanto estética como mecánicamente.

La clave para disfrutar del verano sobre dos ruedas sin sobresaltos es mantener a tu moto fresca, limpia y bien protegida. Con simples hábitos de mantenimiento y un poco de atención, podrás prolongar su vida útil y garantizar un viaje seguro, cómodo y libre de contratiempos.