Si tenemos que mencionar uno de los nombres clave de MotoGP, ese es sin duda el piloto de Kork, Ballington. Y es que muchos recordarán a este ex piloto de motos sudafricano, que nació en Rodesia en 1951 y empezó a demostrar sus dotes sobre las dos ruedas en el mundo de la velocidad en su país natal antes de decidirse a probar suerte en competiciones europeas e internacionales.
Y parece que no lo hizo tan mal, ya que su currículum incluye dos títulos de campeonato mundial, que ganó dos veces consecutivamente en 1978 y 1979 con Kawasaki en las categorías de 250cc y 350cc.
Es imposible hablar de esta leyenda del mundo de los motores y la velocidad sin mencionar a este importante equipo, ya que Kawasaki es protagonista de estos logros en la mayoría de los éxitos que consiguió sobre las dos ruedas. Y este piloto pudo ganar hasta cuatro títulos seguidos gracias a la fábrica de Akashi.
Las victorias se concentraron principalmente en las mejores temporadas del sudafricano, 1978 y 1979. Dos años en los que este bólido de dos ruedas compitió simultáneamente en las categorías de 250cc y 350cc. Siendo algo extraño y destacable que fuera declarado campeón en ambos deportes.
Esta impecable trayectoria fue más que suficiente para que la Federación Internacional de Motociclistas y Dorna Sports (la empresa que organiza el Campeonato del Mundo de MotoGP y posee los derechos comerciales) decidieran por unanimidad conceder a Kork Ballington ser uno de los mejores y nombrarlo MotoGP Legend. Un reconocimiento que el propio piloto agradeció emocionado, ya que difícilmente lo hubiera imaginado hace muchos años, cuando era un joven amante de las motos y podía vivir en un entorno así.
Además, en su opinión, es un gran honor y el final perfecto para una carrera en la que su prioridad no era conseguir reconocimiento internacional por sus carreras, sino dar lo mejor de sí y respetar los valores que siempre ha llevado a gala como deportista. Valores que lo llevaron a respetar a todos sus compañeros y participantes mundialistas.