BMW es una marca que se caracteriza por incluir en sus motocicletas tecnologías que facilitan la conducción y el confort del piloto, asegurando así, una aventura placentera e inolvidable. De lo más nuevo que podemos encontrar en sus modelos son unas válvulas de titanio, con las que es posible incrementar el rendimiento de mejor manera, pues como sabemos la función de las válvulas es permitir la entrada de combustible y aire, así como la salida de los gases generados durante dicho proceso, creando con esto la combustión.
Las válvulas es una pieza que es impulsado por medio de las levas, a una velocidad incalculablemente rápida y entre más ligereza haya en el peso de éstas, mayor será este rendimiento, entonces podemos concluir que, al ser huecas –tal y como éstas lo son-, la velocidad de movimiento será aún mayor.
La nueva versión de la S 1000 RR, ha incluido este sistema, permitiendo con ello que las revoluciones por minuto (rpm) aumentes de 14,200 a 14,600. Es la primera vez que este tipo de válvulas son utilizadas en motocicletas creadas un producción mayor, pues su utilización era exclusiva para prototipos de competencia, habitualmente deportivas.
En palabras del experto de en ingeniería de BMW, Karl Viktor Schaller, nos es explicada de mejor manera la función de las válvulas huecas: “En el motor de una moto deportiva se necesita reducir la masa de las partes móviles, ya que se pueden llegar a ver hasta 5000 fuerzas G sobre una válvula. De manera que cuando se reduce el peso de una válvula, se puede aumentar su aceleración con las mismas fuerzas G. Al usar la tecnología de la válvula hueca, hemos podido aumentar el límite de revoluciones de la S 1000 RR en 400 rpm, ya que las válvulas son un 10% más ligeras que las válvulas de titanio normales”.