Rodamos hacia el sur del estado, donde la fiesta, la playa y la comida son aún mejor que en el norte. La Perla del Pacífico, Mazatlán, nos recibe con el cálido clima que lo caracteriza y la fresca brisa que vivifica cada poro de la piel. Déjate enamorar por el vaivén de las olas y las palmeras que se menean al son de la tambora.

Recorre en tu motocicleta uno de los malecones más grandes del mundo, desde la zona hotelera hasta el paseo Olas Altas en el centro histórico. Disfruta de los manjares que el puerto ofrece: su típico aguachile, el ceviche, el pescado zarandeado, entre otra gran variedad de platillos que no tienen igual.

Despréndete del sol y la arena para conocer el pueblo señorial de Concordia, popular por ricos sus raspados y pan casero elaborado en hornos de piedra. Vayamos un poco más al sur, donde te deslumbrarás con el altar de la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, que está completamente hecho de oro, pues la minería de este Pueblo Mágico fue su principal sustento desde sus inicios. Conoce el pueblo natal de Lola Beltrán y descubre sus hermosos parajes naturales.

Finalicemos este paseo en las costas de Escuinapa, líder en producción de camarón y mango, y anfitrión de la sonada Fiesta del Mar de las Cabras durante el mes de mayo.

En estos municipios es muy común la comida de “cenaduría”: deliciosas tostadas, tacos dorados, flautas, enchiladas y asado, fritangas rellenas de guisos como la carne con papa, marlín y pollo acompañadas de verdura, crema, queso cotija y un caldillo de tomate. Queda atento a nuestro siguiente destino, da el mantenimiento adecuado y constante a tu motocicleta para salir a carretera y tu equipo de seguridad listo para la siguiente aventura.